ECZEMA

· ¿Qué es un eczema?: El eczema o eccema es una enfermedad inflamatoria de la piel que puede manifestarse de diversas formas, pero que suele consistir en la aparición de zonas de la piel enrojecidas con pequeñas vesículas que se rompen fácilmente dejando costras, luego la piel se descama y termina por “liquenificarse” (piel rasposa y endurecida), todo ello acompañado de intenso picor y sensación de quemazón.

· ¿Por qué puede aparecer un eczema?: La aparición de un eczema puede deberse a varios factores que tienen que ver tanto con la propia persona (especial predisposición) como con agentes externos (sustancias irritativas).

· TIPOS DE ECCEMA MÁS IMPORTANTES:

1. ECCEMA ATÓPICO: más frecuentemente llamado DERMATITIS ATÓPICA es un proceso inflamatorio de la piel crónico e intermitente (aparece en brotes), caracterizado por piel seca y picor. Suele localizarse en los pliegues de los brazos y piernas de horma bilateral además de en cara, cuelo y abdomen. Es algo más frecuente en mujeres que en hombres. Y suele desencadenarse tras el contacto con sustancias irritantes, determinados alimentos, sudoración, situaciones de estrés... Hasta el 75% de las personas con dermatitis atópica tienen sus primeras manifestaciones antes de los 2 años de edad, y sólo el 10% de las personas debutan tras los 10 años.

2. ECCEMA SEBORREICO: se localiza en aquellas zonas del cuerpo con mayor producción de grasa (seborrea) como cara, cejas nacimiento del cabello, región centro-torácica y pliegues. Se caracteriza por lesiones enrojecidos cubiertas por escamas de aspecto grasiento.

3. ECCEMA DE CONTACTO: también llamado DERMATITIS DE CONTACTO, se produce por el roce de la piel con determinados agentes irritantes como jabón, detergentes, tintes, cosméticos y metales (sobre todo níquel y cromo). Es, por tanto, muy frecuente entre los trabajadores de la construcción, peluqueras, jardineros... Las lesiones de la piel toman la forma característica del objeto con el que ha tomado contacto (Por ejemplo: unos pendientes o un brazalete).

· Es importante acudir al médico para hacer un diagnóstico preciso e iniciar el tratamiento más adecuado. Además existen una serie de RECOMENDACIONES fundamentales para tratar de evitar o mejorar en lo posible la aparición de un eccema.

· RECOMENDACIONES: Aunque el eccema NO es una enfermedad grave ni contagiosa, también es cierto que puede alterar considerablemente la vida cotidiana de las personas que lo padecen, especialmente la de los niños. Por ello, aquí les mostramos una serie de consejos prácticos que podrán ayudarle en el día a día.

- Evitar el contacto de la piel con sustancias irritantes como geles de baño normales, detergentes y suavizantes.

- Evitar la ropa de lana o fibras acrílicas.

- Evitar el rascado de la piel, no sólo porque empeora el estado de las lesiones sino también por el riesgo de infección.

- Llevar una dieta normal, excepto si existe una clara relación entre determinados alimentos y la aparición de un brote de eccema. Los alimentos más frecuentemente implicados son: huevos, leche de vaca, cacao, fresas, frutos secos y los aditivos y conservantes. En caso de padecer un eccema de contacto por níquel, necesitará llevar una dieta de bajo contenido en NIQUEL: alimentos prohibidos: tomate, espinacas, maíz, cebollas, guisantes, judías, habas, espárragos, arenques, ostras, así como otros alimentos cocinados en utensilios de acero inoxidable.

- Usar jabones grasos o emolientes como los de glicerina o avena.

- Lavar la ropa con jabones blandos sin detergentes, no usar suavizantes ni lejías, y aclarar abundantemente.

- Hidratar la piel con aceites emolientes tras el baño o ducha, y con crema hidratante diariamente.

- Evitar el calor o el frío intensos, y la sequedad.

- Evitar el contacto con objetos de metal brillante como joyería y bisutería (collares, broches, anillos, monedas...), piezas metálicas de prendas de vestir como gemelos, corchetes, cremalleras, botones... y objetos personales como el reloj, gafas, horquillas de pelo, encendedores, pinzas de depilar...y de casa como tiradores metálicos de puertas, tijeras, agujas de coser y de punto, tornillos, cacerolas....

- No se haga tatuajes.

- Evitar pelar o exprimir la fruta con las manos.

- Evitar el contacto con tintes o cosméticos, sobre todo no manipularlos con las manos (utilice guantes).